LA MOTIVACION
es el impulso que mueve a la persona a realizar determinadas acciones y persistir en ellas para su culminación.
Cuales pueden ser los motivos que durante nuestra vida de Artista Marcial pueden llegar a hacernos perder nuestra motivación y abandonar los entrenamientos?
Entre otros pueden ser:
* Lesiones
* Falta de progreso (estancamiento)
* Aburrimiento
* Expectativas (inalcanzables)
* Conciliación Familiar y laboral
* Conflictos o dificultades deportivas
Posiblemente, tarde o temprano, seguro que alguno de estos motivos nos golpearán con dureza. Incluso puede que más de uno, o incluso todos ellos.
Algunas sugerencias para hacer frente al desánimo y recuperar nuestra motivación pueden ser:
- Lesiones. Cuando estas son persistentes y vienen una y otra vez, nuestra moral empieza a verse minada. Es importante una buena recuperación, pero también el análisis de las causas. Posiblemente nuestro cuerpo nos esté diciendo que hay algo que no hacemos bien. Puede ser la intensidad, puede ser la forma. Si queremos estar a largo plazo en el camino, habrá veces donde tendremos que enterenar de otra manera, más suavemente, con más cabeza. Quizás llegue un momento que nuestro físico no sea el de un joven al 100 % y a partir de ahí, tengamos que enfocanos de otra manera. Es cuestión de encontrar la manera de entrenar de una forma que no se dañe nuestro cuerpo y para eso a veces hay que hacer lo más difícil: cambiar nuestra mentalidad.
- Estancamiento y aburrimiento. En todo aprendizaje se empieza muy fuerte, acumulando conocimientos exponencialmente, pero llega un tiempo que cada vez custa más progresar. En Un momento dado, puede parecernos que por muchas horas que le dedicamos no avanzamos o incluso tenemos esa sensación de que cada vez lo hacemos peor. Esto suele llevar consigo un aburrimiento, aunque a veces por repetir las rutinas en exceso, uno puede aburrirse incluso progresando. Ha llegado la hora de cambiar algo. Hay que salir de nuestra zona de confort y explorar nuevas vías de entrenamiento. Seminarios, competiciones, entrenamientos con otros equipos, otras artes marciales complementarias. Todo puede ser bueno para "despertar" y volver a encontrar la ilusión con la que empezábamos.
- Expectativas. Es habitual que soñemos con grandes logros. Desde muchos sitios nos animan a tener una meta gloriosa. Pero que pasa cuando al cabo de interminables años de entrenamiento, seguimos siendo seres humanos y no llegamos a convertirnos en campeones. Qué pasa si ese cinturón deseado no llega, qué ocurre cuando no adquirimos esa destreza que vemos en otros compañeros. Es el momento de mirar atrás y recordar por qué fuimos el primer día a entrenar. Qué es lo que nos aporta, los buenos momentos, el estado de forma, amigos, ...
- Conciliación Laboral y familiar. Difícil de resolver cuando todo se pone en contra de los horarios de entrenamiento. Seguro que alguien más tendrá estos problemas. Debemos encontrar compañeros que puedan encontrar un rato para compartir contigo en las horas a las que te es posible. Nada es imposible y nada es para siempre.
- Conflictos y dificultades deportivas. Me refiero a problemas con compañeros, con la filosofía del equipo o profesor. Incluso si el profesor deja las clases y te encuentras sólo. Ante todo, comunicación. Los problemas es mejor tratarlos cara a cara, pero si aun así no pueden conciliarse posturas, ..., pues puede ser el momento de encontrar un sitio donde estés más agusto. En algún sitio habrá gente que piense y entienda este deporte como tú. Es cuestión de buscar y no tener miedo al cambio.
" No importa lo Lento que avances si nunca te detienes"
